Con esto del verano y la pandemia, el tema de las mamas españolas, me pone malo. Sí, el incesto español que aún no sale del armario, me pone muy caliente. Pensar en todas esas madres folladoras españolas, tipical spanish, producto nacional, hembras ibéricas, que tienen ganas de sexo y no pueden hacerlo, eso es demasiado.

Cada día veo más adolescentes y jóvenes como yo, que miran a su madre como a una mujer para montar, de arrear, y no como la mamaíta que te pone los huevos fritos con patatas.
Yo trabajo con la familia en una tienda de comida, un supermercado pequeño familiar y las maduras entran y salen como quieren de la tienda. Y tontean conmigo que apenas paso de los veinte años. Pues se me ponen tontas porque me tiran los tejos con comentarios más que atrevidos. Y yo cada día voy más salido que un balcón, como para que me vayan poniendo a prueba.

Incesto español de madre tetona en supermercado

Cuántas veces he pensado en esa madre tetona que cuando el padre se va, se queda con su hijo veinteañero como yo, a solas. Y en esas, por el tema que sea, al final la madre y el hijo coquetean. Y sin más, la mamá que ha visto a su pequeño más veces en pelotas, que a su marido, le pela el plátano. Le pajea. Y le dice:

-Menuda polla tienes hijo.
-Sí mamá, y salió por tu coño hace veinte años..
-Claro que sí, hijo mío, … pues ya es hora de que vuelva a entrar, ¿no crees?

Vaya situación. Ya seguiré otro día con más . Pero yo las veo entrar en el supermercado, algunas ahora en verano van sin sujetador, y me pongo las botas cuando miro desde el mostrador. Me gustan cuando llegan cansadas de hacer la compra de otros sitios y dejan las bolsas en el suelo. Y yo, desde lo alto, oteo el horizonte, o sea, sus melones colgantes. Que se balancean como la barca de la feria. Uf!

-Hola Rubén, qué calor traigo, anda dame una casera y uno de esos panes Bimbo tan suaves que tu sabes -me dice
-Claro que sí, ¿el bimbo con corteza o sin prepucio, digo… o sin corteza?
-Rubén, no seas malo… sin corteza, a mí me gusta la miga solamente.
-Eso, y a mí… la miga es lo más importante…- le digo mientras mi mirada se relame con sus tetones.

Mamás folladoras con hijos pollones veinteañeros

Uf, y yo desde arriba la veo esos tetones, esos pezones, ese porno español incesto con hijos pollones, que rellenan la boca a sus mamás hambrientas. Y es entonces cuando hacen a su marido el mayor cornudo de España, porque la putimamá se la chupa a su hijo. Es decir que come polla en familia, como debe ser. Sin salir de casa y aprovechada.

Estas mamás me enloquecen, sobre todo las más guarras, las que van por la casa sin sujetador en estos días de pandemia y de calor. Y sus veinteañeros o quinceañoeros hijos, o sea yo, matándose a pajas después de verlas pasar. Ver cómo van de la cocina al baño, a mear después de una jornada dura de trabajo de ama de casa y su coño es todo un misterio.

Y por qué no, lo mejor, montarla cuando papá está fuera de casa. Unos cuernos en familia. Lo mejor para un cornudo español.