Hola amigos de la azafata tetona española, porque soy una de ellas y encima novata, con menos horas de vuelo que la becaria Lewinsky. En fin, dicen que las azafatas estamos muy buenas pero creo que no es para tanto, lo que nunca he oído es que somos muy guarras y eso, sí que es cierto. Yo misma lo soy, por poner un ejemplo real. Soy una chica que no hace mucho estoy en este mundillo y siempre voy caliente en las escalas que hacemos desde Barcelona a las Canarias, ya sea Tenerife o Las Palmas.

Tengo muchas historias que contar, pero bueno, os diré que la última es con un hombre de negocios que lo vi muy atractivo sentado en primera clase. Era un día normal y corriente y no había casi nadie alrededor de él. Le serví todo lo que me pidió y más. Mientras se bebía un gintonic con un apertivo, yo me insinué.

Le provoqué al máximo para que viera de lo que es capaz de hacer una azafata de altos vuelos, la Lewinsky española, por algo será. Cuando se quiso dar cuenta le estaba desabrochando la cremallera del pantalón sin que nadie nos viera.

Azafata tetona la Lewinsky española

De este modo, se la empecé a chupar arrodillada al máximo, mientras servía aperitivo más que me pidió. La verdad, tenía una polla que ni me cabía en la boca. Todo ese pollón caliente volando a más de 900 km por hora es una sensación que me moja al máximo. Su capullo era gordísimo y yo no paraba de lamerlo como una perra en celo. Ahora entiendo por qué todas las tías se ponen cachondísimas cuando se comen una buena polla.

Sigue y no pares, me decía ese ejecutivo agresivo que lo había conocido en esa escala de Barcelona-Tenerife. Le bajé un poco más los pantalones, porque no había nadie a nuestro alrededor y el piloto y copiloto estaban a lo suyo. Pilotando que no es poco y mis compañeras que ya me conocen estaban haciendo la vista gorda y yo a lo mío: mamando.

Por eso me llaman la azafata tetona Lewinsky, española, porque tío que veo en primera clase que me gusta, tío que se la chupo. Porque mi debilidad es comer pollas, así de claro. Una azafata que moja las bragas a cada momento, que además me podréis encontrar en mi linea erotica Canarias porque soy una canariona muy caliente.

Linea erotica Canarias de azafata caliente

Después de la mamada que aún no se había corrido le dije de ir al lavabo. Ya sabéis, esos lavabos tan estrechos de los aviones que a duras penas cabes tú meando. Pues lo cogí por la corbata y le hice el ademán de ir los dos al water. Uf, qué caliente me pongo cuando hago cerdadas como esta.

Así que lo llevé, nos metimos los dos y le dije: mira cómo meo. Y así tal cual, con las bragas empapadas y con ese olor a coño de azafata en celo, me las bajé y solté las cataratas del Niágara. Meando la lluvia dorada como una buena zorra. «Vaya meada perra», me dijo él. Y se puso delante con su polla todavía morcillona, lo cual no desaproveché.

De esta manera me la volvía meter en la boca mientras miccionaba o meaba, mientras orinaba esta Lewinsky de altos vuelos. Por ello, esta linea erotica de cerda al máximo, que entre Barcelona y Canarias solo hace que felaciones, es para todos vosotros. Para vuestro gozo, para que disfrutéis con fotos guarras de mis amigas: la azafata canaria novata vuelve a volar.