Esperaba como cada viernes a mi mujer que saliera del trabajo para ir a cenar. Ella es delgada, morena, atractiva y no supera los 35 años. Así que aún es joven y guapa. Lo cierto es que últimamente no habla demasiado y la encuentro distante. Y desde hace tiempo también aparte de no hablar mucho, no mantenemos relaciones íntimas.
En más de una ocasión me ha rondado por la cabeza que pueda tener alguna historia con algún compañero de trabajo. Y aún no he visto nada, ni la he notado nada en realidad, pero mi imaginación vuela.
He visto que se podía aquí incluir experiencias u opiniones de todo tipo, así que la mía aunque algo directa, es del todo real y morbosa. Lo de sentirse un cornudo aún sin serlo.
De momento no lo soy, pero solo de pensarlo me da morbo. A veces cuando ella no está tengo la tentación de llamar a alguna línea erótica cornudos, para saber lo que se siente. Al parecer al otro lado hay mujeres que te lo hacen sentir así, de estas que no se cortan un pelo y te dicen de todo.
Mi mujer nunca sabría nada de esto, y menos aún me diría nada de ello. Ella es más bien sumisa conmigo, cuando lo ha sido. Ahora no hacemos nada. Pero solo de pensar que pueda estar con otro o algo así, me da morbo.
Hoy aún la tengo que esperar son cuatro líneas que escribo, y espero que regrese pronto para ir a tomar algo y cenar. Pero ¿y si estuviera con algún compañero?.
No sé si esta sensación le ha pasado a alguien, si es así, me gustaría saberlo.
0 comentarios